Las ramas del derecho civil son diversas y cada una tiene su propia importancia. En este post, vamos a hablar de todas ellas y de lo que abarcan. El derecho civil es el conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones entre las personas. Se ocupa de aspectos como la capacidad para actuar, la formación de contratos, los derechos reales sobre bienes inmuebles, etc. La mayoría de los países tienen un código civil, que es el conjunto de leyes que regulan estas materias.
Las ramas del derecho civil son:
– Derecho de las personas:
Derecho de las personas es un término que se refiere a la protección jurídica de las personas en sus diversas facetas. Dicha protección incluye el derecho a la vida, a la libertad, a la igualdad y a no ser discriminado, entre otros. Además, el derecho de las personas tiene como objetivo garantizar que las personas puedan ejercer libremente sus derechos y cumplir con sus obligaciones. Derecho de las personas también se refiere al derecho internacional de los derechos humanos, que es un conjunto de normas y principios que buscan proteger los derechos humanos en todo el mundo. El derecho internacional de los derechos humanos se basa en el principio de que todas las personas son iguales ante la ley y tienen derecho a igual protección por parte del Estado. Este derecho se concreta en tratados internacionales, convenciones y declaraciones universalmente aceptadas. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) es la principal institución que se encarga de velar por el cumplimiento del derecho internacional de los derechos humanos. A través de su Consejo de Derechos Humanos, la ONU supervisa el cumplimiento de los tratados internacionales de derechos humanos y adopta medidas para hacer frente a las violaciones de derechos humanos en todo el mundo.
– Derecho de familia:
Derecho de familia es una rama del Derecho que estudia las relaciones familiares. Este ámbito tiene como objetivo proteger a las personas dentro de la familia, ya sean niños, ancianos o discapacitados. El Derecho de familia es una disciplina muy importante, ya que regula situaciones tan delicadas como el divorcio, la custodia de los hijos o el derecho a heredar.
– Derecho de los sucesiones: regula las sucesiones intestadas y testamentarias, así como los derechos y obligaciones de los herederos.
– Derecho de propiedad:
El derecho de propiedad es una de las bases del Derecho civil. Según el artículo 33 de la Constitución, toda persona tiene derecho a disfrutar y usar los bienes que le pertenecen, así como a disponer de ellos libremente. El propietario tiene la plena capacidad para gozar y utilizar el bien, así como para transmitirlo o cederlo en usufructo. Dicho derecho de propiedad puede ser ejercido de forma individual o colectiva. El derecho de propiedad tiene una función social, según la cual el titular del derecho está obligado a utilizar el bien de forma adecuada y en beneficio de la sociedad. Dicha función social del derecho de propiedad implica unos límites al ejercicio del derecho, que están regulados por las leyes.
– Derecho contractual: regula la formación, ejecución y extinción de los contratos.
– Derecho penal: se ocupa de las infracciones penales y de las sanciones que se imponen a los infractores.
– Derecho procesal: regula el funcionamiento de los tribunales y el procedimiento judicial.
– Derecho internacional privado: regula las relaciones jurídicas entre personas de diferentes nacionalidades.
– Derecho laboral: regula las relaciones entre empleadores y trabajadores, así como los derechos y obligaciones de ambas partes.
– Derecho mercantil: regula las actividades comerciales y las relaciones entre comerciantes.
– Derecho administrativo: regula las actividades de la administración pública y los derechos y obligaciones de los administradores.
Como podemos ver, el derecho civil regula un gran número de materias y es muy importante para el funcionamiento de la sociedad. Si tienes algún problema en alguna de estas áreas, lo mejor es que nos escribas, uno de nuestros abogados especializados en derecho civil. Él o ella podrá asesorarte y orientarte sobre tus derechos y obligaciones en el ámbito del derecho civil.
